Simbología
Ya desde antiguo, por ser una planta de hoja perenne se la ha asociado con la inmortalidad. Se la puede encontrar en diferentes decoraciones de vasijas cerámicas de la Antigua Grecia. Estaba asociada también a Dioniso, pues se la atribuía la curación de la embriaguez si se la llevaba como guirnalda.
Se consagraba al dios Atis, el amante de Cibeles, representando el ciclo continuo de vida, muerte y renacimiento.3
Por ser al mismo tiempo una planta trepadora, y por la forma en que se entrelaza al crecer, también se la asociaba a una imagen de fidelidad.
Por ser tóxico y provocar vómitos el jugo de la hedera (por contener hederina, una lactona sesquiterpénica) si no se trata, en ocasiones, y dependiendo del contexto, podía llegar a tener una simbología demoníaca.
En cristología, la hiedra es asimilada a la cruz.
En Italia, la hiedra es el símbolo del Partido Republicano Italiano.